El personaje que se autopostuló como predestinado a dar seriedad a la investidura presidencial, acabó por convertirla en la burla del mundo. Las imágenes lo dicen todo.
El personaje que se autopostuló como predestinado a dar seriedad a la investidura presidencial, acabó por convertirla en la burla del mundo. Las imágenes lo dicen todo.