El deshauciado gobierno de Fernando Lugo ha intentado nuevamente una estrategia que atenúe el bochorno global que sufre, publicitando un supuesto pago a "víctimas de la dictadura de Stroessner", calificativo que en Paraguay convierte a una persona en sospechoso de informante o personero del régimen dictatorial contra el cual supuestamente se luchó.
Lugo tiene muchas facturas que pagar, ciertamente, a los hombres de Stroessner que impulsaron su campaña política y ahora le vuelven la espalda. Veamos una breve reseña:
COMPLICIDAD CON LOS HOMBRES DE STROESSNER
El pasado es siempre una reprimenda para la actualidad, escribió Robert Penn Warren, y la frase viene como anillo al dedo al gobierno del clérigo Fernando Lugo. La prensa paraguaya se hizo eco este fin de semana de una supuesta discriminación sufrida por el líder demócrata cristiano Gerardo Rolón Pose, quien recientemente fue denunciado por sus estrechos vínculos con el dictador Alfredo Stroessner, que incluso ofició de testigo en su boda. Hace dos semanas, afiliados a la democracia cristiana incluso solicitaron la expulsión de Rolón Pose, a causa de su cercanía con el dictador que dirigió los destinos del Paraguay con mano de hierro, entre 1954 y 1989.
También en la semana el ex presidente Nicanor Duarte Frutos denunció que su Luís Castiglioni, líder de la facción del partido colorado que responde el obispo-presidente Fernando Lugo, era un consuetudinario participante de los desfiles de batallones de asalto neo-nazis en los cuales rendía pleitesía, con un machete en la mano, al dictador Stroessner.
No se debe olvidar que el presidente del Tribunal Electoral que proclamó vencedor al clérigo es un conocido informante de la policía política de la dictadura, Juan Manuel Morales, y que la prensa mediática que promocionó a Lugo durante su campaña electoral constituye en verdad una resaca casi intacta del aparato de propaganda de Stroessner.
Dice Fernando Savater que si no somos corresponsables del pasado, tampoco tendremos derecho a reclamarnos legítimos propietarios del futuro. En el caso de los hombres del obispo, el pasado se confunde con sus antagonistas con mucho mayor intensidad que la que buscan disimular los discursos.
Y si observamos el entorno y los puntales políticos de Fernando Lugo, no podríamos decir que Rolón Pose es una excepción, precisamente. Veamos algunos ejemplos:
1)Dr. Oscar Ynsfrán. Uno de los principales puntales del proyecto político del obispo, , además de un verdadero precursor del operativo Cóndor.
Un memorando fechado en Washington el 8 de Octubre de 1956, en el que se le asignan torturadores bajo el eufemismo de “asesores” de la temible Policía política, lo delata como participante de tales trámites. En los papeles aparecen como participantes en los papeles Mr. Da Silva, primer secretario de la embajada paraguaya, Dr. Insfrán (de quien hablamos), segundo, Mister Rubottom (ARA) Y Mister Havemeyes (OSA). Se consigna en el documento que se envió una copia a la embajada de Asunción, cifrado ARA (Mr. King), ICA (Mr. Atwood), ARA (Mr. Rubottom) y OSA.
Estos antecedentes sangrientos no le impidieron aparecer públicamente en compañía de Fernando Lugo como uno de los puntales de su proyecto político en múltiples ocasiones sin inconvenientes.
2) Luis Aníbal Schupp. Ex Delegado de Gobierno de la dictadura de Alfredo Stroessner, amigo personal del clérigo-presidente.
3) Luis Alberto Castiglioni. Referente del ala dura, conservadora, neoliberal y pitiyanqui del Partido Colorado, apoyó electoralmente en forma pública al obispo Fernando Lugo para ganar las elecciones del 20 de abril. A poco del cierre de votación, hizo un público llamado para que sus seguidores voten por Lugo.
4) Senador Alfredo "Goli" Stroessner. Respaldó al gobierno en el Senado, en el fracasado intento de nombrar a un tentáculo de su grupo como miembro de la Corte Suprema de Justicia. También respaldó electoralmente la candidatura de Lugo, además de aportar su grupo multimedia y recursos.
5) Senador Orlando Fiorotto, recorrió los barrios de la capital instando a votar por el obispo Fernando Lugo a los seguidores del Partido Colorado.
