Se ha dicho que la hipocresía es un homenaje que el
vicio rinde a la virtud, y nada mejor para comprobarlo que cotejar las campañas
de Zuccolillo para corroborarlo. Pocas
veces un doble discurso fue tan evidente, y una cortina de humo tan poco
creíble.
Las acusaciones en contra suya han arreciado quedando
al descubierto los verdaderos intereses de atacar a varias autoridades
identificadas con el gobierno del presidente Horacio Cartes, destacándose su campaña
contra el senador Víctor Bogado.
Harto de estas campañas direccionadas, Bogado
respondió publicando los chanchullos de su antagonista en una abultada lista de
ilícitos que sigue creciendo, contando para ello con el respaldo de importantes
medios locales. Entre éstas
publicaciones, se destaca el fraude por veinte mil millones en perjuicio de
CONATEL, perpetrado por Zuccolillo en complicidad con autoridades de dicho ente
durante anteriores gobiernos.
Paralelamente,
otros medios de prensa fueron publicando irregularidades del personaje
de marras, algunas verdaderamente excéntricas como haber montado un zoológico
privado sin la documentación exigida por la Ley.
Las denuncias de Bogado fueron sumando, entre ellas
las deudas que tenía Zuccolillo con el fisco, y fueron minando gradualmente la
credibilidad de los ataques que recibía.
Hoy puede percibirse que las publicaciones de ABC son incapaces de
movilizar a nadie de manera espontánea, y solo participan de los ataques al
senador los empleados del mismo y por pura obligación, con la innoble misión de
encubrir a un verdadero patrón del mal.
Lo más escandaloso de todo fue la revelación de la forma
en que el empresario se hace devolver, vía judicial, el dinero que aporta al
Fisco, abusando del control que tiene sobre fiscales y jueces.
Lo había hecho en el caso de CONATEL, haciéndose
devolver una enorme suma con sucias maniobras seudo-legales, pero ese caso
estuvo lejos de ser aislado. Hoy sabemos que para Zuccolillo, instrumentar la
“Justicia” para estafar al estado es una norma.
Este procedimiento le ha valido ser calificado como el
“Emperador de la chicana judicial”, dado que a través de ellas, Zuccolillo ha
logrado eludir por once años el pago de sus impuestos, adeudando al Fisco más
de tres mil millones de la moneda nacional. La deuda corresponde a impuestos y
tasas especiales de solo uno de sus centros comerciales.
El último escándalo que atañe al dueño de ABC estalló
cuando las oficinas de servicios sanitarios descubrieron conexiones ilegales de
desagüe cloacal pertenecientes al mismo Shopping del Sol. El citado centro de
compras realiza ampliaciones que no van acompañadas por los correspondientes
desagües, por lo cual la oficina involucrada procedió a taponar el ramal
ilícito y aplicó una multa de 12 millones de la moneda local.
Este último escándalo indignó al a ciudadanía, pues se
produjo a pocos días de haberse sabido que el mismo empresario construyó un
puente para unir dos centros comerciales sin estar habilitado por la
municipalidad de Asunción.
Nemesio Barreto Monzón escribió un libro titulado
donde hizo la historia de los dueños de medios de Paraguay, especialmente
aquellos enriquecidos merced a privilegios obtenidos bajo la dictadura de
Stroessner.
Asistiendo a las
publicaciones que infructuosamente sigue realizando ABC contra el Senador
Bogado, y leyendo tan pobres argumentaciones para cumplir con la orden del
patrón, solo puedo concluir que mucha razón tenía aquel autor que definió a
Zuccolillo como el hombre que convirtió al periodismo en sinónimo de
servilismo. LAW
